¿Si
Dios tiene un hijo, la blasfemia va contra el Padre o el hijo?
Al
leer los siguientes versos del Corán podríamos aseverar que la blasfemia va
contra el Padre…
“Dios
no tiene hijos ni más dios a su lado; de no ser así, cada dios se iría con lo
que ha creado y los unos serían más elevados que los otros”. (Corán, sura XXIII verso 93)
“A
todo el que dijese: Yo soy un dios al lado de Dios, le daríamos la gehena por
recompensa”. (Corán, sura XXI verso 30)
“Porque
atribuyen un hijo al Misericordioso. A él no le acomoda tener un hijo”. (Corán, sura XIX verso 93)
“Dios
no puede tener hijos. ¡Lejos de su gloria esta blasfemia! Cuando decide una
cosa, dice: Sea, y es”. (Corán, sura XIX verso 36)
“Di.
Gloria a Dios que no tiene hijo, que no tiene asociado al poder”. (Corán, sura
XVII verso 111)
“Dicen:
Dios tiene un hijo. Por su gloria, no. Se basta así mismo; al él pertenece todo
lo que hay en los cielos y en la tierra. ¿Habéis recibido algún poder para
hablar así, o es que decís lo que no sabéis?” (Corán, sura X verso 69)
“Creador
del cielo y de la tierra, ¿cómo ha de tener hijos, él que no tiene compañera,
que ha creado todas las cosas y que conoce todas las cosas?” (Corán, sura
VI verso 101)
“Infiel
es el que dice: Dios es el tercero de la trinidad, en tanto que no hay más Dios
que el Dios”. (Corán, sura V verso 77)
Sin
embargo, al leer los versos 169 y 40 de las Suras IV y III del Sagrado Corán respectivamente, la
blasfemia va contra el hijo; pues el Padre no tiene descendencia hijo, pero sí,
colaterales parientes (iguales); además el hijo es verbo que proviene de Dios
tal como lo establece el Evangelio de Juan, y de alguna manera el Corán lo
ratifica en la Sura V verso 72, en la cual, ante cualquier duda sobre lo escrito en el Corán, éste, establece la solides y veracidad del Pentateuco y los Evangelios como libros anteriores de igual trascendencia y complementos del mismo.
De lo que podemos concluir que el Hijo es igual al Padre, tal como lo enseñó Jesucristo.
Por otra parte, sino hay trinidad es porque existe la Tétrada Sagrada: Padre,
Madre, Vástago y Espíritu.
“Di
a los hombres de las Escrituras: Vosotros no os apoyaréis en nada sólido,
mientras no observéis el Pentateuco, el Evangelio y lo que Dios ha hecho
descender de lo alto”. (Corán, sura V verso 72)
“[…]
El Mesías, Jesús, hijo de María, es el apóstol de Dios, y su Verbo, que echó en
María, es un espíritu que proviene de Dios. Creed, pues, en Dios y en sus apóstoles
y no digáis: hay trinidad”. (Corán, sura IV verso 169)
“Un
día, los ángeles dijeron a María: Dios te anuncia su verbo. Se llamará el Mesías,
Jesús, hijo de María, ilustre en este mundo y en el otro y uno de los familiares
de Dios; […]”. (Corán, sura III verso 40)
“En
[el] principio la Palabra era, y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era
un dios. Este estaba en [el] principio con
Dios. Todas las cosas vinieron a existir
por medio de él, y sin él ni siquiera una cosa vino a existir. Lo que ha venido
a existir por medio de él era vida, y
la vida era la luz de los hombres. Y la
luz resplandece en la oscuridad, mas la oscuridad no la ha subyugado”.
(Evangelio de Juan 1, 1-5)
“Yo
y el Padre somos uno”. (Evangelio de Juan 10, 30)
“Yo
soy el Padre, Yo soy la Madre, Yo soy el Vástago, Yo soy el incorruptible y el
inmaculado”. (Libro
Secreto de Juan 1, 16)
“Pero
Sión siguió diciendo: “Jehová me ha dejado, y Jehová mismo se ha olvidado de
mí”. ¿Puede una esposa olvidarse de su
niño de pecho, de modo que no tenga piedad al hijo de su vientre? Hasta estas
mujeres pueden olvidar; no obstante, yo mismo no me olvidaré de ti”.
(Isaías 49, 14-15)
“Dios
es un Espíritu, y los que lo adoran tienen que adorarlo con espíritu y con
verdad”. (Evangelio de Juan 4, 24)
Félix
M. de Óç.