martes, 27 de octubre de 2015

ODA A LA NUEVA GNOSIS 41



CANTO CUADRAGÉSIMO PRIMERO

1.

Caín-Satanás azuzó como a perros rabiosos al pueblo judío en contra del salvador de la humanidad…

 “Pilato les dijo: “Entonces, ¿qué haré con Jesús, el llamado Cristo?”. Todos dijeron: “¡Al madero con él!”. Él dijo: “Pues, ¿qué mal ha hecho?”. Pero ellos siguieron clamando más y más: “¡Al madero con él!”. (Mateo)

2.

Jesucristo muere en la cruz y sufre de lleno todo el sadismo del Dragón…

“Cuando llegó a ser la hora sexta, una oscuridad cayó sobre toda la tierra hasta la hora nona.  Y a la hora nona Jesús clamó con voz fuerte: “É·li, É·li, ¿lá·ma sa·baj·thá·ni?”, que, traducido, significa: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?”.  Y algunos de los que estaban de pie cerca, al oírlo, empezaron a decir: “¡Miren! Llama a Elías”.  Pero uno corrió, empapó una esponja en vino agrio, y, poniéndola en una caña, le daba de beber, diciendo: “¡Déjen[lo]! Veamos si Elías viene a bajarlo”.  Pero Jesús dio un grito fuerte, y expiró.  Y la cortina del santuario se rasgó en dos, de arriba abajo”. (Marcos)

Jesucristo ingresa a las regiones intermedias, se enfrenta a Satanás [1] y rescata a los humanos anegados en la muerte [2]…

[1] “¡Miren! Viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que lo traspasaron; y todas las tribus de la tierra se golpearán en desconsuelo a causa de él. Sí, amén.  “Yo soy el Alfa y la Omega —dice Jehová Dios—, Aquel que es y que era y que viene, el Todopoderoso.” […] Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo, y, habiéndome vuelto, vi siete candelabros de oro,  y en medio de los candelabros a alguien semejante a un hijo de hombre, vestido de una prenda de vestir que llegaba hasta los pies, y ceñido por los pechos con un cinturón de oro.   Además, su cabeza y su cabello eran blancos como lana blanca, como nieve, y sus ojos como una llama de fuego;  y sus pies eran semejantes al cobre fino cuando fulgura en el horno; y su voz era como el sonido de muchas aguas.   Y en su mano derecha tenía siete estrellas, y de su boca salía una aguda espada larga de dos filos, y su semblante era como el sol cuando resplandece en su poder.  Y cuando lo vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su mano derecha sobre mí y dijo: “No tengas temor. Yo soy el Primero y el Último,  y el viviente; y llegué a estar muerto, pero, ¡mira!, vivo para siempre jamás, y tengo las llaves de la muerte y del Hades”. (Revelación)

“Y otra vez se oyó la voz de trueno que decía: Abrid vuestras puertas eternas, que el Rey de la Gloria quiere entrar.  Y la Furia gritó, rabiosa: ¿Quién es el Rey de la Gloria? Y los ángeles de Dios contestaron: El Señor poderoso y vencedor.  Y, en el acto, las grandes puertas de bronce volaron en mil pedazos, y los que la muerte había tenido encadenados se levantaron.  Y el Rey de la Gloria entró en figura de hombre, y todas las cuevas de la Furia quedaron iluminadas. Y rompió los lazos, que hasta entonces no habían sido quebrantados, y el socorro de una virtud invencible nos visitó, a nosotros, que estábamos sentados en las profundidades de las tinieblas de nuestras faltas y en la sombra de la muerte de nuestros pecados”. (Evangelio de Nicodemo)

[2] “Y el Señor extendió su mano, y dijo: Venid a mí, todos mis santos, hechos a mi imagen y a mi semejanza. Vosotros, que habéis sido condenados por el madero, por el diablo y por la muerte, veréis a la muerte y al diablo condenados por el madero. Y, en seguida, todos los santos se reunieron bajo la mano del Señor. Y el Señor, tomando la de Adán, le dijo: Paz a ti y a todos tus hijos, mis justos”. (Evangelio de Nicodemo)

“Y vi tronos, y hubo quienes se sentaron en ellos, y se les dio poder para juzgar. Sí, vi las almas de los que fueron ejecutados con hacha por el testimonio que dieron de Jesús y por hablar acerca de Dios, y los que no habían adorado ni a la bestia salvaje ni a su imagen, y que no habían recibido la marca sobre la frente ni sobre la mano. Y llegaron a vivir, y reinaron con el Cristo por mil años.  (Los demás de los muertos no llegaron a vivir sino hasta que se terminaron los mil años.) Esta es la primera resurrección.  Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; sobre estos la muerte segunda no tiene autoridad, sino que serán sacerdotes de Dios y del Cristo, y reinarán con él por los mil años”. (Revelación)

3.

Los demonios tiemblan de terror ante la divina presencia de Jesucristo
“Al ver aquello, los dos príncipes de la muerte y del infierno, sus impíos oficiales y sus crueles ministros quedaron sobrecogidos de espanto en sus propios reinos, cual si no pudiesen resistir la deslumbradora claridad de tan viva luz, y la presencia del Cristo, establecido de súbito en sus moradas. Y exclamaron con rabia impotente: Nos has vencido. ¿Quién eres tú, a quien el Señor envía para nuestra confusión? ¿Quién eres tú, tan pequeño y tan grande, tan humilde y tan elevado, soldado y general, combatiente admirable bajo la forma de un esclavo, Rey de la Gloria muerto en una cruz y vivo, puesto que desde tu sepulcro has descendido hasta nosotros? ¿Quién eres tú, en cuya muerte ha temblado toda criatura, y han sido conmovidos todos los astros, y que ahora permaneces libre entre los muertos, y turbas a nuestras legiones? ¿Quién eres tú, que redimes a los cautivos, y que inundas de luz brillante a los que están ciegos por las tinieblas de sus pecados? Y todas las legiones de los demonios, sobrecogidos por igual terror, gritaban en el mismo tono, con sumisión temerosa y con voz unánime, diciendo: ¿De dónde eres, Jesús, hombre tan potente, tan luminoso, de majestad tan alta, libre de tacha y puro de crimen? Porque este mundo terrestre que hasta el día nos ha estado siempre sometido, y que nos pagaba tributos por nuestros usos abominables, jamás nos ha enviado un muerto tal como tú, ni destinado semejantes presentes a los infiernos. ¿Quién, pues, eres tú, que has franqueado sin temor las fronteras de nuestros dominios, y que no solamente no temes nuestros suplicios infernales, sino que pretendes librar a los que retenemos en nuestras cadenas? Quizá eres ese Jesús, de quien Satanás, nuestro príncipe, decía que, por su suplicio en la cruz, recibiría un poder sin límites sobre el mundo entero”. (Evangelio de Nicodemo)

4.

El caos se apodera del infierno, los demonios se sublevan contra Caín-Satanás y sus principales lugartenientes Belzebú y Luzbel.

“Y la Furia, bramando, aullando y abrumando a Satanás con violentos reproches, le dijo: Belzebú, príncipe de condenación, jefe de destrucción, irrisión de los ángeles de Dios, ¿qué has querido hacer? ¿Has querido crucificar al Rey de la Gloria, sobre cuya ruina y sobre cuya muerte nos habías prometido tan grandes despojos? ¿Ignoras cuán locamente has obrado? Porque he aquí que este Jesús disipa, por el resplandor de su divinidad, todas las tinieblas de la muerte. Ha atravesado las profundidades de las más sólidas prisiones, libertando a los cautivos, y rompiendo los hierros de los encadenados. Y he aquí que todos los que gemían bajo nuestros tormentos nos insultan, y nos acribillan con sus imprecaciones. Nuestros imperios y nuestros reinos han quedado vencidos, y no sólo no inspiramos ya terror a la raza humana, sino que, al contrario, nos amenazan y nos injurian aquellos que, muertos, jamás habían podido mostrar soberbia ante nosotros, ni jamás habían podido experimentar un momento de alegría durante su cautividad. Príncipe de todos los males y padre de los rebeldes e impíos, ¿qué has querido hacer? Los que, desde el comienzo del mundo hasta el presente, habían desesperado de su vida y de su salvación no dejan oír ya sus gemidos. No resuena ninguna de sus quejas clamorosas, ni se advierte el menor vestigio de lágrimas sobre la faz de ninguno de ellos. Rey inmundo, poseedor de las llaves de los infiernos, has perdido por la cruz las riquezas que habías adquirido por la prevaricación y por la pérdida del Paraíso. Toda tu dicha se ha disipado y, al poner en la cruz a ese Cristo, Jesús, Rey de la Gloria, has obrado contra ti y contra mí. Sabe para en adelante cuántos tormentos eternos y cuántos suplicios infinitos te están reservados bajo mi guarda, que no conoce término. Luzbel, monarca de todos los perversos, autor de la muerte y fuente del orgullo, antes que nada hubieras debido buscar un reproche justiciero que dirigir a Jesús. Y, si no encontrabas en él falta alguna, ¿por qué, sin razón, has osado crucificarlo injustamente, y traer a nuestra región al inocente y al justo, tú, que has perdido a los malos, a los impíos y a los injustos del mundo entero?” (Evangelio de Nicodemo)

Mientras Jesucristo rescata a Adán y a los humanos; los ángeles capturan y hacen prisionero a Satanás. El Dragón es entregado al nuevo gobierno infernal y es condenado a mil años de cárcel.

“Y, cuando la Furia acabó de hablar así a Satanás, el Rey de la Gloria dijo a la primera: El príncipe Satanás quedará bajo tu potestad por los siglos de los siglos, en lugar de Adán y de sus hijos, que me son justos”. (Evangelio de Nicodemo)

“Y vi a un ángel que descendía del cielo con la llave del abismo y una gran cadena en la mano.   Y prendió al dragón, la serpiente original, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años.   Y lo arrojó al abismo, y [lo] cerró y [lo] selló sobre él, para que no extraviara más a las naciones hasta que se terminaran los mil años. Después de estas cosas tiene que ser desatado por un poco de tiempo”. (Revelación)



Félix M. de Óç. 



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REFLEXIÓN SOBRE LOS CUATRO PILARES DEL CONOCIMIENTO



Reflexión sobre los cuatro pilares del conocimiento

Filosofía, Ciencia, Arte y Religión

1.

La filosofía es poesía, en tanto, que el pensar sea bello para quien piensa y lo escribe, y cadente lo inútil para quien además lo lea…
En estas circunstancias la filosofía se viste de poesía o al menos de poema.

Similarmente el arte de la palabra se hace ciencia, y la ciencia palabra de arte, cuando lo alcanzado por la razón y la epistemología se pueden decir desde una figura literaria sin dañar la esencia de lo construido por el conocimiento científico…

Igual para la religión, que de alguna manera abarca ciencia y filosofía en una extraña simbiosis, y asimismo, define en ella, lo más bello de ambas, desde el palco mismo del arte.

Sin embargo,

La filosofía puede degenerar en política y economía: capitalismo consumista o comunismo burocrático igual da, la ciencia en tecnología, sobre todo militar, la religión en fundamentalismos de corte terrorista y el arte en propaganda y control abusivo de la información…   

Por ello, es menester conservar vírgenes los cuatro pilares del conocimiento, en tanto no sea posible echar a perder sus imágenes proyectadas inversamente en el espejo del engaño.

Pero si se puede hay que destruirlas con una piedra cortante, sin el menor arrepentimiento.  

2.

Entiendo por filosofía lo humano del pensamiento, el hecho mismo de pensar, pero de hacer uso del lenguaje en la idealidad del universo interior de cada ser pensante. Dicen los que saben que es el pensamiento del hombre hacia sus adentros. Para mí es la doxa en cuanto la propia opinión del hombre con respecto a su ser intrínseco, bien sea individual o social.

En cambio la ciencia es la reina de las cosas del afuera, del universo externo y natural, de los objetos, de la realidad o mejor dicho, su intérprete a través de paradigmas racionales y epistemológicos. Verbigracia, las matemáticas.

Ahora bien, así como la filosofía es el conocimiento del hombre por sí mismo y para sí mismo; la ciencia es la prueba racional y observable de la naturaleza para el hombre, incluyendo al homo sapiens.

Entre tanto, que la religión es la historia sagrada del hombre, desde su nacimiento hasta su muerte y más allá, que es cuando en verdad cobra importancia. Entonces la religión es la razón de ser del ser cuando muere.

Y el arte
¿Qué es el arte?
El arte es la facultad de expresar los tres pilares restantes como si fuesen uno solo.          


Félix M. de Óç.



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viernes, 23 de octubre de 2015

ODA A LA NUEVA GNOSIS 40


CANTO CUADRAGÉSIMO

1.  
      
La dimensión intermedia funciona como un velo que no permite ver el más allá y hace que las almas añoren el más acá, el mundo físico… romper con esta venda es la confrontación contra Satanás y por ende, la liberación del ser… 

Jesucristo habla con su Madre sobre la muerte y la confrontación contra Satanás.  

“El salvador respondió: “cuando, enviado por mi Padre para la salvación del mundo, fui colgado de la cruz, el príncipe de las tinieblas vino hacía mí; pero, no pudiendo encontrar ningún vestigio en su corazón, se retiró vencido. Yo le vi y tú le verás, según la ley común del género humano, a la que te conformaras muriendo, pero él no podrá hacerte daño, porque no hay nada en ti que esté en él, y yo estaré contigo para protegerte. Ven, pues, en paz, porque la milicia celeste te espera para que yo te introduzca en las alegrías del paraíso”.   (Libro  del tránsito de la santísima Virgen, Madre de Dios)

“Y ordenó al arcángel Miguel que trajera el alma de santa María. Y en seguida el arcángel Gabriel levantó la piedra que cerraba el monumento, y el señor dijo: “Levántate, amiga mía; tú, que no has sentido corrupción por el contacto del hombre, no sufrirás la destrucción de tu cuerpo en la sepultura”  (Libro  del tránsito de la santísima Virgen, Madre de Dios)

2.

Adán aún en las regiones intermedias pide ayuda a su hijo, para salir del averno. Seth por su parte, ruega el perdón para su padre y los patriarcas a lo cual responde Jehová a través de Miguel.
 
“Entonces Seth, aproximándose a los patriarcas y a los profetas, expuso: Me hallaba yo, Seth, en oración delante del Señor, a las puertas del Paraíso, y he aquí que Miguel, el numen de Dios, me apareció, y me dijo: He sido enviado a ti por el Señor, y presido sobre el cuerpo humano. Y te declaro, Seth, que es inútil pidas y ruegues con lágrimas el aceite del árbol de la misericordia, para ungir a tu padre Adán, y para que cesen los sufrimientos de su cuerpo. Porque de ningún modo podrás recibir ese aceite hasta los días postrimeros, cuando se hayan cumplido cinco mil años. Entonces, el Hijo de Dios, lleno de amor, vendrá a la tierra, y resucitará el cuerpo de Adán, y al mismo tiempo resucitará los cuerpos de los muertos. Y, a su venida, será bautizado en el Jordán, y, una vez haya salido del agua, ungirá con el aceite de su misericordia a todos los que crean en él, y el aceite de su misericordia será para los que deban nacer del agua y del Espíritu Santo para la vida eterna. Entonces Jesucristo, el Hijo de Dios, lleno de amor, y descendido a la tierra, introducirá a tu padre Adán en el Paraíso y lo pondrá junto al árbol de la misericordia”. (Evangelio de Nicodemo)

3.

Satanás habla con sus demonios sobre Jesucristo y se prepara para la contienda final. 

“…he aquí que Satanás, príncipe y jefe de la muerte, dijo a la Furia: prepárate a recibir a Jesús, que se vanagloria de ser el Cristo y el Hijo de Dios, y que es un hombre temerosísimo de la muerte, puesto que yo mismo lo he oído decir: Mi alma está triste hasta la muerte. Y entonces comprendí que tenía miedo de la cruz. Y añadió: Hermano, aprestémonos, tanto tú como yo, para el mal día. Fortifiquemos este lugar, para poder retener aquí prisionero al llamado Jesús que, al decir de Juan y de los profetas, debe venir a expulsarnos de aquí. Porque ese hombre me ha causado muchos males en la tierra, oponiéndose a mí en muchas cosas, y despojándome de multitud de recursos”. (Evangelio de Nicodemo)

“Y, al oírlo, la Furia repuso: Yo te conjuro, por tu poder y por el mío, que no lo traigas hacia mí. Porque, cuando me enteré de la fuerza de su palabra, temblé, me espanté y, al mismo tiempo, todos mis ministros impíos quedaron tan turbados como yo. No pudimos retener a Lázaro, el cual, con toda la agilidad y con toda la velocidad del águila, salió de entre nosotros, y esta misma tierra que retenía su cuerpo privado de vida se la devolvió. Por donde ahora sé que ese hombre, que ha podido cumplir cosas tales, es el Dios fuerte en su imperio, y poderoso en la humanidad, y Salvador de ésta, y, si le traes hacia mí, libertará a todos los que aquí retengo en el rigor de la prisión, y encadenados por los lazos no rotos de sus pecados y, por virtud de su divinidad, los conducirá a la vida que debe durar tanto como la eternidad”. (Evangelio de Nicodemo)



Félix M. de Óç. 




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ODA A LA NUEVA GNOSIS 39



CANTO TRIGÉSIMO NOVENO

1.

¡Jesucristo paradigma del universo viviente!

El universo es un organismo vivo que relativamente nació en el pasado, se hace hoy en el presente y luego morirá; pero finalmente, resucitará  en el futuro, como Jesucristo el Hijo de Dios. 
    
“Entonces, haré que mi Elegido habite entre ellos; transformaré el cielo y lo convertiré en bendición y luz eternas...”   (Libro de Enoc)

“Ante Él no hay renuncia; Él sabe desde antes de que el mundo fuera creado qué es para siempre y qué será de generación en generación”. (Libro de Enoc)

“…Cuando aparezca la asamblea de los justos y los pecadores sean juzgados por sus pecados y expulsados de la superficie de la tierra”. (Libro de Enoc)

“Y ocurrirá en esos días que los hijos de los elegidos y santos descenderán de lo alto del cielo y su linaje llegará a ser uno con el de los hijos de los hombres”. (Libro de Enoc)

“Y escuché las voces de esas cuatro presencias y cómo ellas pronuncian alabanzas ante el Señor de la Gloria.  La primera voz bendice al Señor de los espíritus por los siglos de los siglos.  A la segunda voz la escuché bendiciendo al Elegido y a los elegidos que dependen del Señor de los espíritus.  A la tercera voz la oí orar e interceder por los que viven sobre la tierra y suplicar en nombre del Señor de los espíritus.  Y escuché la cuarta voz expulsando a los Satanes e impidiendo que lleguen hasta el Señor de los espíritus a acusar a quienes viven en la tierra”. (Libro de Enoc)

2.

Jesucristo habló así a la humanidad

“Jesús le dijo: “Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí.  Si ustedes me hubieran conocido, habrían conocido a mi Padre también; desde este momento lo conocen y lo han visto”. (Juan)

“¿No crees que yo estoy en unión con el Padre y el Padre está en unión conmigo? Las cosas que les digo a ustedes no las hablo por mí mismo; sino que el Padre que permanece en unión conmigo está haciendo sus obras.  Créanme que yo estoy en unión con el Padre y el Padre está en unión conmigo; de otra manera, crean a causa de las obras mismas.  Muy verdaderamente les digo: El que ejerce fe en mí, ese también hará las obras que yo hago; y hará obras mayores que estas, porque yo estoy siguiendo mi camino al Padre.  También, cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, esto lo haré, para que el Padre sea glorificado con respecto al Hijo.  Si ustedes piden algo en mi nombre, lo haré.  ”Si ustedes me aman, observarán mis mandamientos;  y yo pediré al Padre, y él les dará otro ayudante que esté con ustedes para siempre,  el espíritu de la verdad, que el mundo no puede recibir, porque ni lo contempla ni lo conoce. Ustedes lo conocen, porque permanece con ustedes y está en ustedes.  No los dejaré desconsolados. Vengo a ustedes.   Un poco más y el mundo ya no me contemplará, pero ustedes me contemplarán, porque yo vivo y ustedes vivirán.  En aquel día ustedes conocerán que yo estoy en unión con mi Padre y ustedes están en unión conmigo y yo estoy en unión con ustedes.  El que tiene mis mandamientos y los observa, ese es el que me ama. A su vez, el que me ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me mostraré a él claramente”. (Juan)

“Le dijo Judas, no el Iscariote: “Señor, ¿qué ha pasado que vas a mostrarte claramente a nosotros y no al mundo?”.  En respuesta, Jesús le dijo: “Si alguien me ama, observará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos nuestra morada con él.  El que no me ama no observa mis palabras; y la palabra que ustedes oyen no es mía, sino que pertenece al Padre que me ha enviado.  ”Mientras permanecía con ustedes les he hablado estas cosas.   Mas el ayudante, el espíritu santo, que el Padre enviará en mi nombre, ese les enseñará todas las cosas y les hará recordar todas las cosas que les he dicho.  La paz les dejo, mi paz les doy. No se la doy a ustedes como el mundo la da. No se les perturbe el corazón ni se les encoja de temor.   Oyeron que les dije: Me voy y vengo [otra vez] a ustedes. Si me amaran, se regocijarían de que sigo mi camino al Padre, porque el Padre es mayor que yo.   De modo que ahora se lo he dicho a ustedes antes que suceda, para que, cuando suceda, crean.   Ya no hablaré mucho con ustedes, porque el gobernante del mundo viene. Y él no tiene dominio sobre mí,  pero, para que el mundo conozca que yo amo al Padre, así como el Padre me ha dado mandamiento [de hacer], así hago”. (Juan)




Félix M. de Óç. 


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ODA A LA NUEVA GNOSIS 38



CANTO TRIGÉSIMO OCTAVO

1.

 Así como las estrellas en el pasado son fantasmas con respecto a su observador en el presente; así mismo, el observador es observado desde el futuro del tiempo, como recuerdo de su pasado en su propio presente [1].

Por otra parte, cuando el organismo físico sucumbe a la entropía, ante el organismo psíquico se abre el continuo espacio-temporal desde el origen hasta el fin y el comienzo de lo imperecedero; pues la conciencia en estado puro es atemporal; por lo tanto, es capaz de observar todo cuanto aconteció, acontece y acontecerá en el universo…

El ser observará en un instante todo lo que ocurrió en 65 mil millones de años de evolución: el Big-Bang en el primer día [2]; luego, la evolución material en el segundo, la integración de fuerzas naturales y partículas, la creación de átomos y moléculas y después de soles y de galaxias; posteriormente, la evolución biológica en el tercer día, la molécula de ADN, la vida, los primeros organismos unicelulares, luego plantas y animales, el homo sapiens y el cerebro humano; después la evolución cultural y el hombre en el cuarto día, la creación del mundo y las instituciones; más tarde, la evolución psíquica del ser en el quinto día y en el sexto el Big-Crunch [2], el equilibrio térmico, el triunfo de la entropía sobre el universo físico; para finalmente, observar la resurrección, la venida del hijo del hombre como Dios y el establecimiento de un universo espiritual y definitivo en el séptimo día [3]. 

[1] “Y Aquel que estaba sentado en el trono dijo: “¡Mira!, voy a hacer nuevas todas las cosas”. También, dice: “Escribe, porque estas palabras son fieles y verdaderas”.   Y me dijo: “¡Han acontecido! Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. A cualquiera que tenga sed le daré de la fuente del agua de la vida gratis.  Cualquiera que venza heredará estas cosas, y yo seré su Dios y él será mi hijo”. (Revelación)

“La mano de Jehová resultó estar sobre mí, de modo que él me sacó en el espíritu de Jehová y me colocó en medio de la llanura-valle, y esta estaba llena de huesos.  Y él me hizo pasar junto a ellos todo en derredor, y, ¡mire!, había muchísimos sobre la superficie de la llanura-valle y, ¡mire!, estaban muy secos.  Y él empezó a decirme: “Hijo del hombre, ¿podrán estos huesos llegar a vivir?”. A eso dije: “Señor Soberano Jehová, tú mismo bien sabes”.  Y pasó a decirme: “Profetiza sobre estos huesos, y tienes que decirles: ‘Oh huesos secos, oigan la palabra de Jehová:   ”’Esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová a estos huesos: “Aquí estoy haciendo entrar en ustedes aliento, y tendrán que llegar a vivir.  Y ciertamente pondré sobre ustedes tendones y haré que venga sobre ustedes carne, y ciertamente los cubriré con piel y pondré en ustedes aliento, y tendrán que llegar a vivir; y tendrán que saber ustedes que yo soy Jehová” (Ezequiel)

[2] (hace relación a los días uno y seis) “…porque aquellos días serán [días de] una tribulación como la cual no ha sucedido una desde [el] principio de la creación que Dios creó hasta aquel tiempo, y no volverá a suceder”. (Marcos)

“Dijo Jesús: «Quien haya comprendido (lo que es) el mundo, ha dado con un cadáver. Y quien haya encontrado un cadáver, de él no es digno el mundo»”.  (Evangelio gnóstico de Tomás)

“El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras de ningún modo pasarán”. (Lucas)

[3] “Y vi un nuevo cielo y una nueva tierra; porque el cielo anterior y la tierra anterior habían pasado, y el mar ya no existe.   Vi también la santa ciudad, la Nueva Jerusalén, que descendía del cielo desde Dios y preparada como una novia adornada para su esposo.  Con eso, oí una voz fuerte desde el trono decir: “¡Mira! La tienda de Dios está con la humanidad, y él residirá con ellos, y ellos serán sus pueblos. Y Dios mismo estará con ellos.  Y limpiará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no será más, ni existirá ya más lamento ni clamor ni dolor. Las cosas anteriores han pasado”. (Revelación)

“Y no vi en ella templo, porque Jehová Dios el Todopoderoso es su templo; también [lo es] el Cordero.  Y la ciudad no tiene necesidad de que el sol ni la luna resplandezcan sobre ella, porque la gloria de Dios la alumbraba, y su lámpara era el Cordero.  Y las naciones andarán por medio de su luz, y los reyes de la tierra llevarán a ella su gloria.  Y sus puertas de ninguna manera se cerrarán de día, pues allí no existirá noche. Y llevarán a ella la gloria y la honra de las naciones”. (Revelación)



Félix M. de Óç.



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miércoles, 7 de octubre de 2015

CANTO A LA REVOLUCIÓN CUBANA



Al “che” Güevara Fidel castró
A Camilo Cienfuegos dio.
De Cuba el dictador, Fidel
 De Cuba sacó al dictador.
Hoy cuba libre Raúl brindó
¡Viva la revolución!
No hay balseros ni pobreza
No hay pobreza ni balseros;
Miami tampoco existe como si existe la URSS
Y democracia en Venezuela 
Hoy cuba libre Raúl brindó
¡Viva la revolución!


Félix M. de Óç.

martes, 6 de octubre de 2015

ODA A LA NUEVA GNOSIS 37



CANTO TRIGÉSIMO SÉPTIMO

1.

Desde la llegada de Jesucristo al mundo, Satanás se ensañó contra el hijo del hombre, su persecución fue implacable, pues sabía que el tiempo de los dos estaba cerca. Persiguió a Jesús niño a través de Herodes, razón por la cual María y José debieron escapar hacia Egipto.

“Y se vio en el cielo una gran señal, una mujer vestida del sol, y la luna estaba debajo de sus pies, y sobre su cabeza había una corona de doce estrellas,   y ella estaba encinta. Y clama en sus dolores y en su agonía por dar a luz.  Y se vio otra señal en el cielo, y, ¡miren!, un dragón grande de color de fuego, con siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cabezas siete diademas;   y su cola arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó abajo a la tierra. Y el dragón se quedó de pie delante de la mujer que estaba a punto de dar a luz, para, cuando diera a luz, devorar a su hijo. Y ella dio a luz un hijo, un varón, que ha de pastorear a todas las naciones con vara de hierro. Y su hijo fue arrebatado hacia Dios y hacia su trono.  Y la mujer huyó al desierto, donde tiene un lugar preparado por Dios, para que la alimentaran allí mil doscientos sesenta días”.  […] Ahora bien, cuando el dragón vio que había sido arrojado abajo a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón.   Pero las dos alas de la gran águila le fueron dadas a la mujer, para que volara al desierto a su lugar; allí es donde es alimentada por un tiempo y tiempos y medio tiempo, lejos de la cara de la serpiente. Y la serpiente lanzó de su boca agua como un río tras la mujer, para hacer que ella fuera ahogada por el río.  Pero la tierra vino en ayuda de la mujer, y la tierra abrió su boca y se tragó el río que el dragón había lanzado de su boca.   Y el dragón se airó contra la mujer, y se fue para hacer guerra contra los restantes de la descendencia de ella, los cuales observan los mandamientos de Dios y tienen la obra de dar testimonio de Jesús. (Revelación)

“Después que se hubieron retirado, ¡mire!, el ángel de Jehová se apareció en un sueño a José, y dijo: “Levántate, toma al niñito y a su madre, y huye a Egipto, y quédate allá hasta que yo te diga; porque Herodes está para buscar al niñito para destruirlo”.   De modo que él se levantó y tomó consigo al niñito y a su madre, de noche, y se retiró a Egipto,   y se quedó allá hasta el fallecimiento de Herodes, para que se cumpliera lo que Jehová había hablado por su profeta, que dijo: “De Egipto llamé a mi hijo”. (Mateo)

2.

Al siguiente cara a cara con Jesús, Satanás le ofreció poder y riquezas sobre el mundo físico y de paso le advirtió a cerca de su destino. La cuestión era de tentarle a renunciar a su misión en la tierra y gobernar juntos el inframundo o hacerle padecer toda clase de sufrimientos y vejámenes por una humanidad que a todas luces siempre le sería ingrata… 

“Entonces Jesús fue conducido por el espíritu al desierto para ser tentado por el Diablo.   Después que hubo ayunado cuarenta días y cuarenta noches, entonces sintió hambre.   También, el Tentador vino y le dijo: “Si eres hijo de Dios, di a estas piedras que se conviertan en panes”.   Pero en respuesta él dijo: “Está escrito: ‘No de pan solamente debe vivir el hombre, sino de toda expresión que sale de la boca de Jehová’”. Entonces el Diablo lo llevó consigo a la ciudad santa, y lo apostó sobre el almenaje del templo  y le dijo: “Si eres hijo de Dios, arrójate abajo; porque está escrito: ‘A sus ángeles dará encargo acerca de ti, y te llevarán en sus manos, para que nunca des con tu pie contra una piedra’”.  Jesús le dijo: “Otra vez está escrito: ‘No debes poner a prueba a Jehová tu Dios’”. De nuevo el Diablo lo llevó consigo a una montaña excepcionalmente alta, y le mostró todos los reinos del mundo y su gloria,   y le dijo: “Todas estas cosas te las daré si caes y me rindes un acto de adoración”.  Entonces Jesús le dijo: “¡Vete, Satanás! Porque está escrito: ‘Es a Jehová tu Dios a quien tienes que adorar, y es solo a él a quien tienes que rendir servicio sagrado’”.  Entonces el Diablo lo dejó, y, ¡mire!, vinieron ángeles y se pusieron a ministrarle”. (Mateo)

“De modo que el Diablo, habiendo concluido toda la tentación, se retiró de él hasta otro tiempo conveniente”. (Lucas)


Félix M. de Óç. 



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ODA A LA NUEVA GNOSIS 36



CANTO TRIGÉSIMO SEXTO

1.

La desaceleración súper-lumínica en los orígenes del cosmos, arrojó la materia al futuro del tiempo, donde los últimos de la generación perfecta, los predestinados a ser dioses, se retrotrajeron en el tiempo a los primeros días de la creación, para re-crear de nuevo el universo… 

“…los [hombres] elaboran dioses y adoran la obra de sus manos. Sería conveniente que fueran más bien los dioses los que venerasen a los hombres como corresponde a la verdad”. (Evangelio de Felipe)

“Bendito sea el Dios y Padre de nuestro señor Jesucristo, porque nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en unión con Cristo, así como nos escogió en unión con él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin tacha delante de él en amor. Pues nos predeterminó a la adopción mediante Jesucristo como hijos para sí mismo, según el beneplácito de su voluntad”. (Efesios) 

2.

La humanidad, en el pasado del tiempo, es la base de la futura generación de imperecederos, razón por la cual, es semilla [1] que se debe cuidar. Sin embargo, al dragón no le interesa eso, sino todo lo contrario, o sea, que no exista más, que perezca o que se hunda entre cadenas, como una simiente de esclavos. Para ello, Satanás ha elaborado todo un sistema de confusión psíquica [2], llevando al hombre a guerras fratricidas, a cometer homicidios, suicidios, y toda clase de vejámenes contra sus propios congéneres. De allí, que su misión sea detener todo progreso espiritual de la humanidad e impedir su sacrosanto matrimonio con Dios. No obstante, Jesucristo ha contrarrestado para siempre al enemigo [3].

[1] “El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;   la cual es, de hecho, la más pequeña de todas las semillas, pero cuando ha crecido es la más grande de todas las legumbres, y se hace un árbol, de modo que vienen las aves del cielo y hallan albergue entre sus ramas”. (Mateo)

[2] “Sabemos que somos hijos de Dios, y que el mundo entero está bajo el control del maligno”. (Primera de Juan)

“…ya que Dios quizás les dé arrepentimiento que conduzca a un conocimiento exacto de la verdad,  y recobren el juicio fuera del lazo del Diablo, ya que han sido pescados vivos por él para la voluntad de ese”. (Segunda de Timoteo)

 [3] “El sembrador de la semilla excelente es el Hijo del hombre;   el campo es el mundo; en cuanto a la semilla excelente, estos son los hijos del reino; pero la mala hierba son los hijos del inicuo,  y el enemigo que la sembró es el Diablo. La siega es una conclusión de un sistema de cosas, y los segadores son los ángeles.   De manera que, así como se junta la mala hierba y se quema con fuego, así será en la conclusión del sistema de cosas.  El Hijo del hombre enviará a sus ángeles, y ellos juntarán de su reino todas las cosas que hacen tropezar, y a los que cometen desafuero,  y los arrojarán en el horno de fuego. Allí es donde será [su] llanto y el crujir de [sus] dientes.  En aquel tiempo los justos resplandecerán tan brillantemente como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos, escuche”. (Mateo)
  
“[...] "Este es el Hijo del Hombre, que posee la justicia y con quien vive la justicia y que revelará todos los tesoros ocultos, porque el Señor de los espíritus lo ha escogido y tiene como destino la mayor dignidad ante el Señor de los espíritus, justamente y por siempre”.  (Libro de Enoc)

“No améis al mundo ni a las cosas del mundo, porque el orgullo del mundo es propio del diablo con su corrupción. Recordad que el Señor de la gloria, que ha creado todo, tuvo compasión de vosotros, para salvarnos de la esclavitud de esta época. Frecuentemente, el diablo ha deseado hacer que el sol deje de brillar sobre la tierra y que la tierra deje de producir frutos. Desea consumir a los humanos, como el fuego que corre por el rastrojo, quiere tragarlos como agua. Esto es porque el Dios de la gloria tuvo misericordia de nosotros y Él envió a su Hijo al mundo para que nos salvara del cautiverio. El no le advirtió esto a ningún ángel, arcángel ni potestad, sino se transformó en hombre cuando Él vino a nosotros para salvarnos. Por ello sois sus hijos así como Él es vuestro Padre”.  (Apocalipsis de Elías) 




Félix M. de Óç.   



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domingo, 4 de octubre de 2015

ODA A LA NUEVA GNOSIS 35



CANTO TRIGÉSIMO QUINTO

1.

En el espacio infinito que lo abarca todo, el “Espíritu/Dios” ha preparado para cada “Esencia/Existencia” un lugar lleno de amor y de alegría. Es el propio estar de la conciencia en los propios brazos del Espíritu…
  
El espacio es la múltiple frontera, pluridimensional entre cada “Esencia/Existencia” consigo misma y con las demás. 

“En la casa de mi padre hay muchas moradas...”  (Juan)

2.

Parte de la humanidad ascenderá ante Jehová de los Ejércitos [1] por medio de la Ley de Moisés y la otra, a través del Sagrado Corán y el profeta Mahoma; entre tanto, la Hermandad del Cordero ascenderá ante Dios, a los Doce Reinos y a través de su Hijo Jesucristo [2].

[1] “Él realmente se tragará a la muerte para siempre, y el Señor Soberano Jehová ciertamente limpiará las lágrimas de todo rostro. Y el oprobio de su pueblo quitará de toda la tierra, porque Jehová mismo [lo] ha hablado. Y en aquel día uno ciertamente dirá: “¡Miren! Este es nuestro Dios. Hemos esperado en él, y él nos salvará. Este es Jehová. Hemos esperado en él. Estemos gozosos y regocijémonos en la salvación por él”. (Isaías) 

[2] “Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días el sol será oscurecido, y la luna no dará su luz, y las estrellas caerán del cielo, y los poderes de los cielos serán sacudidos.  Y entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del hombre, y entonces todas las tribus de la tierra se golpearán en lamento, y verán al Hijo del hombre viniendo sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria.  Y él enviará sus ángeles con un gran sonido de trompeta, y ellos reunirán a los escogidos de él desde los cuatro vientos, desde un extremo de los cielos hasta su otro extremo”. (Mateo)

3.

Todo ha acontecido ya desde el primer día hasta el día séptimo, no hay nada nuevo bajo el sol [1]

El pasado, el presente y el futuro son relativos a la conciencia. Desde la gran explosión súper-lumínica seguida de una gran implosión de igual magnitud en desaceleración súper-lumínica, la evolución tocó tope y lo que tenía que acontecer aconteció y aún así, los últimos de la evolución fueron los primeros [2] y re-crearon el mundo [3]. 
  
[1] “Lo que ha llegado a ser, eso es lo que llegará a ser; y lo que se ha hecho, eso es lo que se hará; y por eso no hay nada nuevo bajo el sol”. (Eclesiastés)

[2] “De esta manera los últimos serán primeros, y los primeros, últimos”. (Mateo)

[3] “Y el que estaba sentado sobre el trono dijo: ‘¡Mira! Estoy haciendo nuevas todas las cosas’. También dice: ‘escribe, porque estas palabras son fieles y verdaderas’. Y me dijo: ‘¡Han acontecido! Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. A cualquiera que tiene sed le daré de la fuente del agua de la vida gratis. Cualquiera que venza heredará estas cosas, y yo seré su Dios y él será mi hijo’”.  (Revelación)




Félix M. de Óç. 



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